Cerrar ciclos… es necesario

¿Cuántas veces en tu vida te has aferrado a una situación que sabes que ya no tiene solución, que terminó porque así tenía que ser, y  que sabes perfectamente, porque así te lo dice tu intuición que lo mejor es seguir hacia delante y que por más que lo desees ya no hay otra opción?

Cerrar ciclos… es necesario

Todo mundo habla de que “cerrar ciclos” es lo mejor para no dejar nada pendiente con otras personas, pero en mi opinión, estas experiencias por las que pasamos y nos cuesta trabajo aceptar que terminaron, han cerrado por si solas su ciclo, y no es que seas tú quien no lo quiere cerrar.

Estás donde quieres estar, porque así lo estás decidiendo, tal vez aferrada a algo, alguien, porque nos has podido o querido (depende qué tan sincera eres contigo) asimilar y aceptar que “eso” ya no funciona más …

Los diferentes ciclos por los que pasas en esta vida se cierran solos, la oportunidad que tienes de vivirlos se te da el tiempo que duren, la emoción que le pusiste, las ilusiones con que los alimentaste, y seguramente al término de un ciclo se iniciará otro y otro y otro, así sucesivamente, pero si tú te quedas con la sensación y el sentimiento de que algo te faltó al cerrarse esa puerta, pues entonces es que eres tú quien no ha aceptado el fluir de tu destino, de tu paso por este Universo.

Algunas personas piensan que si no “Cierran el Ciclo” entonces no evolucionan; pero, pregúntate ¿en verdad no estás evolucionando?, ¿Tienes alguna certeza de que lo que viviste tenía que durar para siempre? Y aún así, cuando algo termina sigues respirando, sigues viviendo, te sigues re-construyendo una y otra vez hasta que te das cuenta que ese ciclo según que te faltaba cerrar, ya no tiene importancia en tu vida, ya ha pasado lo peor y ahora si estás dispuesta a dejar entrar lo que está tocando a tu puerta.

Cerrar ciclos… es necesario

Claro que avanzas! Y por supuesto que evolucionas! Tal vez más lentamente, pero no dejas de hacerlo. A veces cuando terminas con una experiencia llámese relación, amistad, cuestión laboral, etc. Quisieras borrar definitivamente todo lo que te recuerde esa situación pasada, pero detente a pensar … ¿Porqué borrar lo que en su momento fue agradable? Si te dio lo que quisiste tomar, lo que te hizo feliz, lo que te ayudó a superarte en su momento en todos los aspectos, entonces, ¿Porqué querer borrar de tu vida y mejor no asimilarlo, aceptarlo, y guardarlo incluso para que la próxima vez, te alerte de no volver a vivir en lo mismo que te ha causado dolor?

El reciente fallecido escritor mexicano José Emilio Pacheco: decía: “El que se va no vuelve aunque regrese”. Una frase muy cierta pero que cuesta trabajo aceptar, porque siempre se quiere lo que ya se fue, lo que ya no se puede tener, pero que cuando tomas conciencia de lo que estás atravesando es porque así tiene que ser, porque es lo mejor que la vida te puede ofrecer, y cuando llegas a este punto estás a un paso de romper toda atadura que te impide salir avante y tomar tu realidad, tu presente en mejores circunstancias y a vivir realmente el momento a momento.

Algunos tips que sé que te ayudarán a quitarte esa idea de que es necesario que cierres ciclos:

• Cuando una experiencia en tu vida haya llegado a su fin, deja salir todo lo que tienes que decir en ese momento, no te guardes nada para que no caigas en el “le hubiera dicho”. No hay nada peor que quedarse con esa sensación hasta de culpabilidad por no haber hablado a tiempo.

• Si se trata de una experiencia amorosa que terminó, te aconsejo que cortes de tajo con todo lo que te relaciona a esa persona, no guardes recuerdos de ningún tipo, en verdad aunque duela, tíralos, quémalos o dónalos pero no mantengas en tu mente a ninguna persona en la que tu no estás en la suya.
• No te crees falsas expectativas, no te eches culpas ni busques culpables, si fuiste tu la que se equivocó y pides perdón y aún así la relación ya no funciona, entonces da vuelta a ese capítulo y abre una página nueva, no te aprisiones, no te estanques ni te aferres en lo que ya no será, errar es de sabios y definitivamente todos hemos cometido un error en esta vida.

• Cambia tu filosofía de vida, hay cosas que no funcionan porque no son para ti, o porque el tiempo que las tuviste así tenían que ser y lo primero que tienes que hacer es A-CEP-TAR, una vez que lo haces volverás a sentir ese remanso de infinita paz que habías perdido y que pensabas no recuperarías jamás.
• Libérate porque tú así lo quieres, porque sabes que es lo mejor, porque lo necesitas para empezar de nuevo desde el punto donde te hayas quedado, no pasa nada, no es tiempo perdido, simplemente has pasado por una experiencia que la vida te ofreció y tu decidiste tomarla, así es como puedes verlo y le estarás abriendo la puerta a la luz en tu existencia. Siempre tendrás esa mejor opción: Volver a empezar, hacer lo que más quieres, lo que te motiva, aliméntate de otras ilusiones, de otros propósitos,

Medita, ejercita tu mente para ponerla en paz, hay un ejercicio que te ayudará mucho:

Cerrar ciclos… es necesario

Ya que estés con el cuerpo y la mente relajada, imagina que hay varias burbujas grises vacías por encima de tu cabeza, etiquétalas, ve metiendo en cada una de ellas todos los sentimientos de preocupación, ansiedad, miedo, angustia, todo lo que quieras desaparecer de tu vida, y suéltalas una por una, ve como se elevan en el infinito hasta perderse, termina el ejercicio reemplazando estas burbujas por otras nuevas de colores en las que estarás metiendo tus nuevos proyectos, esperanzas, ambiciones, anhelos, en fin todo lo que quieres que llegue a ti. Practícalo todos los días, varias veces si es necesario y verás como empiezas a tomar nuevamente el control de tu vida.

Cambia tus pensamientos cualquiera que éstos sean, anímate a ser diferente, a estar en constante cambio porque así es la vida, acepta tu responsabilidad, disfruta de tu libertad, elige ser quien quieres ser sin culpas, sin miedos, aprende con cada experiencia ya sea positiva o negativa.

Dentro de todo esto, hay tres cosas muy importantes que siempre debes llevar como un tatuaje:

1.-        Aprende a decir adiós

2.-        Se agradecida con lo que te ofrece la vida

3.-        Vuelve a empezar –  siempre tendrás esa opción.

Piensa que el que estés viva es un regalo que se te dio y la mayoría de las veces no te das cuenta, pregúntale al Universo todas las noches cuál es tu propósito en esta vida, porqué estás aquí; Sentirte bendecida por lo que tienes es el mejor pensamiento que puedes tener todos los días, puedes pensar en el pasado pero sin querer que se convierta en tu presente o peor aún en tu futuro, el pasado bien lo dice su significado pasado está!

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