Allá va el hombre solitario

bajando por la rivera del río

cree haber bajado de la luna

sueña con ser polvo de estrellas

 

El amor le jugó a la inversa

tirando unas cartas obscuras

encubiertas bajo el sol y los astros

condenándolo a vivir sin clemencia

 

Camina sin tregua el hombre solitario

carga sus miradas siempre al horizonte,

limites de soles ocultos en sus pupilas

dilatados en los crepúsculos, pletóricos

de angustias retenidas en el tiempo.

 

Sigue el hombre callado su ruta de vidacon el silencio que palidecen atardeceres,

reclama  al cielo el propósito de la vida

palabras mudas tragadas solo por el viento.

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