¿Cómo saber cuál es tu misión de vida?

¿Cómo saber cuál es tu misión de vida?

Todos los días desde que amanece, tal vez tu primera pregunta al despertar sea ¿Qué voy hacer el día de hoy?, esta pregunta la puedes responder muy fácilmente si estudias o trabajas y tienes ya definidos tus días, pero qué pasa si te cuestionas o replanteas esta pregunta por ¿Para qué estoy aquí? ¿Qué o cuál misión tengo en esta vida?

¿Para qué estás aquí? ¿te lo has preguntado? cuando te empiezas a cuestionar es porque tu nivel espiritual te está exigiendo un cambio, tienes que empezar a avanzar, y entender cuál es tu tarea en este momento de tu existencia, qué es lo que viniste a aprender o tal vez a enseñar, en una palabra ¿Cuál es mi misión en esta vida?, y podrás preguntarte ¿Mi misión? ¿Acaso tengo alguna aparte de estudiar, trabajar? y efectivamente todos los seres humanos de este plano existencial tenemos una misión que cumplir, para ser seres partícipes y activos en esta rueda de la vida.

Es increíble la cantidad de personas que se sienten desorientadas, perdidas, que han extraviado su brújula como siempre digo yo, y se sienten a la vez inconformes, frustradas, y hasta tristes por la forma en que se va desarrollando su existencia, puede ser que tengas todo y a la vez sientes que no tienes nada, ¿Te ha pasado?, pero si al cuestionarte, si al sentirte un poco existencialista te analizas sobre quién eres y quién quieres ser, entonces estás empezando el camino que muchas personas ni siquiera se han detenido a contemplar, un camino que puedes llamar de conocimiento interior, de encontrarte a ti mismo, un camino de sabiduría, porque precisamente el conocernos mejor interiormente nos vuelve sabios.

No es un camino fácil, hay que pasar por muchos recovecos, pero una vez que se abre la puerta ya no puedes dar marcha atrás o cerrarla antes de tiempo, y mucha gente cuando empieza a conocerse mejor, se espanta, se preocupa y prefiere que las cosas sigan como hasta entonces, pero esto ya no es posible, porque es ahí en donde has plantado la semilla que tu alma te ha estado exigiendo desde la primera vez que te sentiste inconforme en ser como eres.

Es ahí en esos momentos de reflexión en donde aparecen los primeros signos que te van a dar la respuesta. Es cierto que para emprender el viaje hacia nuestro interior no hay una regla en específico sobre todo si no sabes aún cuál es tu misión, pero cuentas con dos luces de señalamiento muy importantes dentro de ti que te van a ir guiando, una es tu corazón y la otra es tu intuición, estas dos maravillas con las que todo mundo cuenta, pero no siempre las perciben, siempre están contigo, son las banderas que te están recordando que tienes una misión que te falta por cumplir, pero por lo general no se les hace caso, pero se quedan ahí como lucecitas centelleando hasta que las vuelvas a ver, y cuando fijas tu vista, se encienden y justamente en ese momento te dan la certeza de que vas por el camino adecuado.

¿En qué te ayuda conocer todo esto? Todos, absolutamente todos pasamos por tormentas en la vida, crisis de todo tipo que al momento de vivirlas podrás creer que son eternas, y que ya de por vida es lo que vas a vivir, de tal forma que si no se cambian las circunstancias y los pensamientos, se puede convertir en tu peor martirio, no le estás dando el beneficio de la duda a tu mente que está jugando contigo y mucho menos te permites pensar que todo es pasajero, una mala racha, una tormenta que pasará y que si en los momentos en que te encuentras en el ojo del huracán te detuvieras a analizar a poner atención, entonces recobrarías la calma y la tranquilidad y en ese instante estás adquiriendo CON-CIEN-CIA

¿Cómo saber cuál es tu misión de vida?

¿Y te preguntarás y qué es la conciencia, para qué me sirve? la CONCIENCIA es observarte y aprender a reconocer las señales que te están dando tu corazón y tu intuición, no en balde las tienes contigo. Es aprender a dar una respuesta a una acción que emprendiste, de hace mucho tiempo o no, es analizar-sin-juzgar qué es lo que has hecho, cómo has respondido a lo que te ha puesto la vida, quién has elegido ser, y es cuando le empiezas a dar el sentido a tu vida a través de tus acciones y tu “misión” se asoma lentamente hasta que la reconoces y abarca todo el camino que te abre a experiencias nuevas, a propósitos con más sentido, a seguir venciendo obstáculos sin que creas que son luchas contigo misma o con la vida, es cuando aprendes a dejar de sentirte o ser víctima de las circunstancias, cuando aprendes a decir SI a todo, bueno y no tan bueno, en una palabra es cuando aceptas que eres un ser espiritual y estás aquí no por casualidad.

¿Cómo puedes empezar a visualizar tu misión en esta vida?

Registra en positivo – Como si abrieras un almacén en tu memoria, registra las cosas buenas, positivas, quién te ha ayudado, las oportunidades que te ha dado la vida, las puertas que se te han abierto, los acontecimientos felices, lo mejor que te ha pasado en tu existencia. Ahí ya estás construyendo un camino hacia la felicidad, recuerda que positivo atrae positivo y no son sólo palabras, seguramente ya lo has comprobado.

Renueva tu Espíritu –  Las personas que no han llegado a cierto nivel de conciencia se les hace fácil decirte ¡cambia! y a veces terminan  molestándose contigo porque creen que con sólo decírtelo lo vas a lograr, pero muchas veces son ellas las que quieren cambiar a través de ti y no se dan cuenta. Aquí es tu oportunidad para renovarte viéndote en ellas como un espejo y preguntarte si no es ya tiempo de empezar con un cambio espiritual.

Deja de ser un generador emocional negativo – A todos nos llega el momento en que la vida te pone un alto y te exige una retribución por estar aquí, así que mientras mejor y más rápido lo hagas, empezarás a alejarte de los miedos, ansiedades y preocupaciones, empújate tu misma a tirar a la basura lo que no te conviene, lo que sabes que te hace infeliz.

Transita por nuevas rutas mentales – Cada vez es mayor el número de personas que se preocupan por conocer cómo funciona su cerebro, existen muchos estudios científicos en donde te explican que efectivamente tu cerebro puede renovar las neuronas a través de simples ejercicios mentales, entonces porqué no apasionarte con estos tema, busca información veraz, que te ayude a entender cómo funcionar mente-cuerpo (libros del Dr. Joe Dispensa, son muy claros y fáciles de leer)

Haz un plan de vida – Te parecerá pérdida de tiempo, pero puedes ir anotando tus actividades diarias, así sabrás tus tiempos perdidos, fíjate metas, horarios, planes, esto te ayudará a rebajar y quitar las cuotas de incertidumbre y ansiedad, aunque puedes dejar un espacio para los imprevistos, las sorpresas que tiene la vida para ti son como un poco de combustible para tu motor.

Por último y muy importante, cuando estés haciendo cambios en tu vida y te veas envuelta en momentos de crisis, no tires la toalla, y sobre todo no pienses que antes estabas mejor, algunas veces la vida te sacude para quitar tanto hollín que se ha ido pegando a tu paso por este plano, puede ser doloroso, pensar que no tiene sentido, pero eso es porque precisamente se está expandiendo tu conciencia y es lo que te está empujando a hacer un cambio en tu vida.

Hártate de la situaciones que no te gusten para que te obligues a experimentar cosas nuevas, llénate de fuerzas y no temas hundirte más de lo que pudieras haber estado ya, es hora de que empieces a salir, deja de contener el aliento y anímate a emerger a la superficie que te ofrece un mundo lleno de posibilidades, no esperes a cansarte más, no esperes a enfermarte, busca y encuentra tu misión, empieza a recorrer el camino y hazte preguntas importantes como:

¿Estoy haciendo lo que quiero?

¿Qué he estado posponiendo?

¿dónde quiero estar?

¿Cómo y con quién quiero vivir?

¿Qué quiero tener?

Muchas veces preguntarnos es empezar a sacar capas y más capas como una cebolla para encontrarnos, pero anímate a hacerlo, haz ajustes, pero sobre todo no lo dejes para “después”, así no funciona. Entonces, tómate un espacio para ti solamente para ti, siéntate en tu rincón preferido y empieza por responder a estas preguntas con calma, sin apresuramiento, no estás en un examen escolar, pero si en un test existencial con el que encontrarás un sentido a lo que estás haciendo en tu vida, y por ende te llevará en directo a tu misión,  sabrás para qué estás en este Universo, y verás que te será fácil irla cumpliendo día a día.

Y seguramente tendrás que arreglar algunos detalles, pero ya empezaste y recuerda … No hay vuelta de hoja!

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