Perder el método
Reconocer en la obra, inventándonos en una tradición de lo imaginado mediante la crítica (o anticrítica). Esta tradición unen a la crítica y al poeta cuando —como dice Victoria de Stefano (1984)— «los seres finitos se reproducen al infinito». Entonces escritor y crítico se aproximan al trapecio donde nos apoyamos en la nada a punto de caer al abismo (donde reside el género que está por descubrirse).... Seguir Leyendo...