Hay veces en la vida que, ya sea por circunstancias personales que estamos pasando o simplemente porque sentimos que donde estamos no nos llena nuestro día a día lo suficiente, tenemos la necesidad de irnos, de mudarnos, de cambiar de país, ciudad o lugar y refrescarnos.

Nunca es tarde para hacerlo y empezar de cero. Cada día que sale el sol y estamos vivos, es una nueva oportunidad que nos da la vida para hacer aquello que nos hace felices, sin importar la edad y la situación en la que estemos.

“Si no te gusta donde estás, cámbiate, no eres un árbol”. Esta frase que pertenece a la sabiduría popular es tan cierta, ¡somos libres!

#Nevertoolate para mudarse y empezar de cero

#Nevertoolate para mudarse y empezar de cero

Ahhh, pero los miedos… miedo al futuro, a lo desconocido, a perder el trabajo, a la soledad, a no tener suficiente dinero, a que nos pase algo… Paulo Coelho dijo una vez: “Cuántas cosas perdemos por miedo a perder” y cuánta razón tiene… ¿Qué seríamos capaces de hacer si no tuviéramos miedo?

Pero no hablemos del aspecto negativo del hecho, sino del positivo, para aquellos valientes que ya superaron esa etapa y lo tienen decidido, solo queda buscar destino. ¿Con cuál nos quedamos?

Unos se guiarán por la economía del país, por la facilidad de encontrar trabajo, por su seguridad, por ese sitio que ha sido siempre tu lugar favorito en el mundo, por esa playa en la que pasaste unos días de vacaciones inolvidables, por una buena oferta nocturna, por donde conociste al amor de su vida…

Escojas el lugar que escojas, estás haciendo lo correcto, no vale mirar atrás y arrepentirse porque cada etapa tiene sus cosas positivas y negativas, lo importante es que no hayas tomado la decisión basada en nadie ni en caliente, sino como un proceso muy madurado y convencido del paso que darás.

“Si no te gusta donde estás, cámbiate, no eres un árbol”. Esta frase que pertenece a la sabiduría popular es tan cierta, ¡somos libres!

No importa si es a 20 o 20.000 kms, solo importa que empieces feliz el nuevo capítulo de tu vida, ya sea solo o acompañado, en pareja o en familia, con o sin hijos, todos pueden aprender de esta nueva experiencia.

Si estás haciendo la mudanza para superar un divorcio, una muerte, un desengaño o un despido laboral, créeme que la vida no se acaba aquí y afortunadamente el tiempo lo cura TODO.

¡Empaca ya! no lo pienses más, el mundo necesita más valientes como tú.

 

Sigue leyendo a Emilia López.

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