Las legañas
cómo cortinas
de tus ojos brillantes
nácar de porcelana
sánscrita.

En la mina de tu corazón
mezquino de orín y excrementos.

De tu tic, tac
metódico
la bomba natural
exhorta vida.

Que riega y da vida
a cualquier ser
dogmático.

Ralentí espasmódico
disfunción cardióloga.

Corazón distrofia,
sistemático, sesgo,
desnutrido, endeble,
inocuo.

Transparencias
transcritas, translúcidas
transmitidas,
por el genoma juguetón
de la nano genética
tecnología futurista.

La mente decide
el corazón obedece
las emociones sánscritas
los sentimientos desorientados.

Buscan corazones
mordios a dentelladas
por la dentadura vampiresa.

Océanos de sangre
emanan como ríos
de lava por la cornisa
de un volcán
que saca de dentro
todo lo que tiene
fuego caliente,
lava hirviente.

Perjuicios increpados
moral anticuada.

La lluvia llora
la fugacidad
del deseo pensado
de estrella fugaz.

Meteoro que cae,
y se deshace
antes de besar
el suelo de origen.

Errante por el espacio
ha de vagar,
como un alma en pena,
común condición
del cambio elocuente
del universo singular
su corazón de níquel,
ya no responde
perdió la emoción
al vagar por el vacío.

Sin más.

 

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