Tzintzuntzan, Michoacán

Siguiendo con nuestro recorrido por el hermoso Estado de Morelia, nuestra siguiente visita es Tzintzuntzan, cuyo nombre significa “Lugar de Colibríes”, fue una de las capitales purépechas más importantes durante la época prehispánica.

Vivió su época de esplendor en el Periodo Clásico, hacia el año 1200 D.C, cuando se consolidó como un gran centro de gobierno, fue ahí donde residía el Rey Calzontzin quien controló una gran extensión territorial e hizo de Tzintzuntzan un pueblo con una estructura social muy compleja.

Cuenta la historia que cuando Pátzcuaro decayó, Tzintzuntzan pasó a ser capital, categoría que conservó hasta la Conquista, ya que en 1533, Vasco de Quiroga se instaló en estas tierras donde estableció la primera cabeza de la Diócesis de Michoacán. El convento franciscano de Tzintzuntan, cuya construcción se remonta a siglo XVI, también es notable y se dice que los olivos que crecen en su atrio fueron plantados por Vasco de Quiroga.

Tzintzuntzan ofrece una ventana a la cultura indígena de Michoacán, Ubicado a sólo 60 km de Morelia, este Pueblo Mágico te sorprenderá con sus increíbles construcciones -prehispánicas y coloniales- que miran hacia el gran lago de Pátzcuaro, y a la fecha conserva una zona arqueológica, llamada Las Yácatas, en referencia a sus cinco edificaciones piramidales redondeadas, típicas de esta cultura. Además de su pasado precolombino, en este tranquilo pueblo michoacano podrás descubrir un soberbio ex convento franciscano otoñal.

Es un típico pueblo donde sobresalen sus calles empedradas y antiguas, casas de una planta con techos de teja rojiza y pronunciados aleros que cobijan a los visitantes del sol inclemente o de la llovizna. Sigue manteniendo su lengua, costumbres y tradiciones indígenas, como por ejemplo la danza de los paloteros que llamará poderosamente tu atención por su armonía, ritmo y, especialmente, por el significado tan profundo que encierra.

Esta danza se vuelve única porque, a diferencia de la gran mayoría de los bailes folclóricos mexicanos, aquí no se muestra un zapateo, o giros acrobáticos o resistencia de varias horas en la interpretación, por el contrario, los movimientos son cadenciosos, se van marcando los pasos  con solemnidad y mucha gallardía, y el grupo va evolucionando con una cierta marcialidad.

El nombre de Paloteros se le dio porque el instrumento principal de la danza es un palo que cada uno de los integrantes del grupo lleva en la mano y en una parte del baile hacen un círculo donde van chocando los palos produciendo un sonido característico, se dice que esto se debe a que el palo utilizado proviene de un árbol conocido como “uña de gato” y que, debe ser tratado durante varios días para darle la consistencia que la Danza requiere. Y fue creada para representar esa preparación que los purépechas (tarascos) hacían en la región norte de su territorio, antes de entrar en combate con los chichimecas que, ocasionalmente cruzaban la frontera natural de ambos pueblos marcada por el río Lerma. De allí esa marcialidad que se presenta en el desarrollo de la danza.

Lo que no debes perderte:

En el tradicional mercado podrás adquirir hermosas creaciones de madera, barro, tule y paja, alfarería de alta temperatura y trabajos con fibras vegetales, así como coloridos bordados que representan la historia y el folklor de esta región. Podrás adquirirlo alrededor de la Plaza Principal y en algunas calles anexas existen tiendas y puestos callejeros.