La felicidad es ese pequeño trocito de cielo que te abraza a cada instante.

Felicidad es sentir la naturaleza, el aroma de las flores te dan una sensación de dulzura y ternura.

La esperanza te toma de la mano y te dice: «Estoy aquí».

La tranquilidad es mirarte a los ojos y decir: «Sigo aquí», porque es el «sí» de la vida. Las marcas que el trauma dejó en tu corazón se borran si experimentas el perdón.

Depender de las opiniones de los demás disminuye tu felicidad y haces lo que ellos quieren y desplazas tus propias metas, debes tomar en cuenta tu valía. Comprende que el mundo funciona de forma independiente; sé tú mismo y tómate el tiempo para trascender espiritualmente, para alcanzar una consciencia superior que te permita acceder a lo divino, al Ser Supremo.

Encuentra en qué eres bueno, descubre qué harás con valentía y orden. Las oportunidades llegan en sincronía con la vida, es decir, cuando estás listo para ellas. Cada nota musical tiene un significado para la sinfonía, así eres tú en el universo, eres esa pequeña nota musical esencial para la composición armoniosa y bella en el universo.

 

La realidad te hará fluir, ver la vida tal como es, hará que te comportes de acuerdo a la melodía, tienes infinidad de melodías para encajar si eres la nota musical, depende de ti darte tu lugar en el universo, en el sitio donde te encuentres cómodo y te sientas feliz será el adecuado para ti, no reprimas tus sentimientos, fluye, eres valiente, ¡Eres feliz!

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