Javier Garcia

Días Marrones

Los días de Manuel Gil estaban todos teñidos de un color, “El marrón”, el color que lo acompañaba en su sufrimiento y en el día a día de su triste vida. Abandonado por su mujer, la misma que había hecho de él un cornudo y algunas otras cosas peores, ya casi no tenía otra vida que la laboral, bastante frustrante también...... Seguir Leyendo...

Tras los autores

Los autores, creadores de mundos, de vidas,. muchos de ellos capaces de hacerte sumergir entre las páginas de sus obras como en tu propia vida. 

Aunque algunos ya no estén entre los vivos, su propia mano tuvo la virtud de inmortalizarlos a través del mensaje que transmitían mediante los libros que publicaron, y que son ya parte integrante de nuestras vidas. ... Seguir Leyendo...

Puro teatro

El teatro, un espectáculo que hace estremecer al espectador. Derriba barreras entre el público y el escenario, transportando a todos a otro mundo, otra realidad, en la que se desarrolla la historia que se escenifica. En el teatro todos son parte de la historia que se narra, algo que el cine ya apenas consigue.... Seguir Leyendo...

Javier Garcia

Avilés, Asturias. Cosecha de 1976. A pesar de tener cierta afición por el dibujo, estudios de artes gráficas y diseño industrial, se decantó con decisión por los medios escritos. Copywriter y creador de historias. Narrador polivalente con experiencia creativa. Recolector de experiencias que plasmar en papel, con especial interés por la literatura pulp y el género negro. Aficionado al cine, series de televisión, blogs, libros, comics, y todo material impreso que caiga en sus manos. Buscando el significado oculto de las palabras mientras examina a los personajes. Con un particular sentido del humor, escribe blogs y relatos, y alguna vez que otra disfruta paseando por el territorio de la poesía. Es común encontrarle leyendo o libreta en mano en un café, la mirada dirigida al infinito, y la imaginación en plena efervescencia mientras recorre las calles para recibir a la próxima idea. Escribir (y leer) es para él algo como beber y respirar, vital y necesario. Un autor que sea o no leído, siempre necesitará sentir el bolígrafo morder el papel, y dejar esa marca, que tan sólo parece tinta, pero que es la misma esencia de quien escribe.