Tengo para ofrecerte mil lunas
un reloj de arena, varias primaveras fotos encontradas, una flor fresca
y un sol que ilumina nuestra mesa.

Tengo para ofrecerte, el amor eterno
un cálido abrazo, una sonrisa sincera continuar a tu lado sin pasarme de acera.

Tengo para ofrecerte, mil caminos para seguir compartiendo vivencias canciones pasadas,
y mi alma que siempre te rodea.

No dudes ni un minuto
que aunque los años pasen y el cansancio te oprima
te rodeará mí vida entera.

Sigue leyendo a Claudia Nemirovsky

No Hay Más Artículos