Sin duda un personaje polémico, el 45º presidente de los Estados Unidos de América nunca se cansó de polarizar, un personaje misógino, discriminador, difamador, violento y profundamente berrinchudo, en otras palabras, un niño sobre protegido y con el único atributo del dinero a su favor.

Hemos visto de todo en los últimos años en el poder, especialmente gobiernos populistas que lo único que buscan es un beneficio propio antes de una verdadera vocación de servicio, pero en el caso de USA, es tremendo el impacto que ha tenido este bebe gobernante, con su reality show de un golpe de estado frustrado, Trump se niega a ceder el trono sin demostrar el daño y alcances de sus berrinches, interponiendo demandas para obstaculizar la toma de poder de Biden y dando paso a insurgentes dentro de la Casa Blanca, un verdadero show mediático para decirnos que no sabe perder.

Al igual que todos los líderes totalitarios, Trump tiene una visión perversa de la complejidad de las sociedades. En lugar de reconocer la gran diversidad y pluralidad del mundo actual, hablaba de que él los llevaría a un destino glorioso, destino fue una palabra muy repetida, así son los mesiánicos. Muchos hablan de que estamos entrando a la era de la post verdad. No, eso ya fue descrito hace décadas por Hannah Arendt, especialista en totalitarismos, quien dijo: “el sujeto ideal para un régimen totalitario no es el nazi o el comunista convencidos, sino gente para la cual la distinción entre hechos y ficciones y la distinción entre verdad y falsedad no existe más”.

Lo critico de este berrinche presidencial es que si estuviera pasando en otro país la opinión del primer mandatario de USA sería que es un golpe de estado y buscarían intervenir a toda costa, la lealtad que buscaba Trump en sus allegados era imposible de encontrarse, ya que la imposición de poder, abusos constantes y fuerza sólo conllevan a la traición, mientras un verdadero líder, que estimula, promueve y une genera lealtad, entonces ¿por qué pensó Trump que encontraría lealtad en House of Cards?, en mi país hay un dicho que resume esto de manera sencilla: cría cuervos y te sacaran los ojos.

El mandato de Trump finaliza el 20 de enero y enfrentara acciones legales estatales que no estarían cubiertas por un indulto federal. Incluyen una investigación criminal del fiscal de distrito de Manhattan, Cyrus Vance, y una investigación civil de la fiscal general de Nueva York, Letitia James, sobre si infló el valor de los activos para obtener préstamos y beneficios fiscales en sus negocios. Lo interesante a partir de hoy será saber si se va auto perdonar o si procede su destitución a petición de los demócratas. Al menos las redes lo han castigado suspendiéndole las cuentas personales, con el fin de una transición pacifica y legal, es decir “le mandaron callar” algo que falto hacer a sus padres en su momento, veamos que nos depara esta nueva etapa demócrata en el país más influyente del mundo, pero con el gobernante mas berrinchudo de la historia moderna.

 

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