Al encontrar una manera de expresarse emocionalmente, solidaridad y empatía, ayudar a los demás, es la manera de ayudarse a sí mismo. Aleja los pensamientos de aislamiento social, las acciones a compartir, la liberación de la carga y la tristeza. En tu viaje descubrirás cambios en ti mismo, detrás están las rabias, porque aprendemos a través de la causa altruista, para comprender a la humanidad. Diez en empatía, en la tolerancia de los géneros, comparte con alegría, porque el alma generosa será prosperada; Y sea lo que sea, él también estará satisfecho. Enseña lo que te gusta, promueve la convivencia en el entorno social, obtén retroalimentación, te sorprenderá el beneficio mutuo. El altruismo cambia la forma de pensar, la alegría, la paz y el afecto en el cerebro cambian los pensamientos que causan estrés, fatiga emocional, miedo y soledad. La paz que se ve en el brillo de los ojos, en una mirada y un gesto amable, en una sonrisa con un brazo extendido, un abrazo sincero y un saludo cordial. Es posible modificar los pensamientos de rivalidad entre los géneros, con una nueva perspectiva de la vida.Practica el humanismo, te sentirás bien contigo mismo, lograrás cambiar el funcionamiento de tu cerebro, una nueva forma de ver y vivir la vida. Un ejemplo vivo, cuando eres un niño y ayudas a tus compañeros, sin saberlo, ya estás en tu causa altruista. Cuando una persona infringe una norma de coexistencia cívica, el trabajo comunitario puede ser una forma y un medio para modificar el comportamiento, por otra parte, se favorece la tolerancia de los géneros. En la vida adulta, se muestra que las personas que ofrecen tiempo a una causa altruista, han alcanzado una mejor calidad de vida.

 

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